Tags

No tags :(

Share it

Cube

Este aparatito se ha convertido desde hace año y medio en el centro de nuestro salón. ¿Has oí­do hablar de convergencia? Pues alrededor de este ordenador, al que en casa llamamos simplemente «el trasto», giran parte de nuestras actividades de ocio.

Para empezar, es el repositorio de toda nuestra música, de todas las fotos, y de muchí­simo más contenido, como pelí­culas, series de televisión y documentos electrónicos.

Tiene instalada además su correspondiente tarjeta capturadora de ví­deo, con lo que funciona igual que un ví­deo VHS «de los de antes», y como un DVD lector-grabador. Así­ que grabamos nuestros programas y series favoritos, las pelí­culas que no terminamos de ver, reproducimos DVDs y cualquier otro contenido multimedia, incluida la colección de música o de fotos.

Y gracias a internet, hacemos prácticamente lo mismo desde fuera de casa…

Le instalé en su dí­a una Mandriva Linux (entonces era todaví­a Mandrake) y el software MythTV que es el que se encarga de gestionar todo esto y de realizar las grabaciones. Y viene acompañado de su interfaz web para programarlo desde cualquier parte del mundo, incluso con el teléfono móvil.

Y algo sin lo que puedo vivir a dí­a de hoy es a conectarme desde el trabajo para escuchar música, sin tener que llevar el portátil lleno a rebosar, y sin las limitaciones de espacio del iPod que uso para el viaje. Instalas dos cositas (icecast e ices0), el software de interfaz web Tunez, y ya tienes montada una radio por internet. Toda tu colección de música sin tener que llevarla encima
música, documentos, pelí­culas, fotos…

¿Y todo esto a santo de qué? Es como cuando sales un dí­a de casa y descubres que te has dejado el teléfono móvil. Esa sensación de «¿qué voy a hacer todo el dí­a?». Pues en nuestro caso hemos estado un tiempo sin «trasto», por suicidio de un disco duro. Dos semanas de recuperación a base de trocitos de media hora para recuperar lo que habí­a en el disco (que nadie cite la palabra backup, por favor) y tenerlo otra vez operativo. ¿Sin qué podéis vivir vosotros, aparte del móvil y las gafas?
Bienvenido sea otra vez a la vida 🙂