Las sandalias del pescador
Morris West, 1963
Punto de lectura, 2001
Hay quien ve en Morris West a un visionario, que fue capaz de predecir algunos de los hechos políticos y sociales del siglo XX. En el caso de esta novela, el nombramiento del Papa Juan Pablo II. Yo no creo mucho en esa visión de West, sino que creo más bien en la pura coincidencia, pero como curiosidad no está mal saber que hay quien le ve con una bola de cristal entre las manos…
En el caso de «Las sandalias del pescador», tras la muerte del pontífice es elegido nuevo Papa un cardenal polaco, Cirilo Lakota, que ha pasado 17 años preso del régimen soviético. Se da la circunstancia de que durante su condena, fue torturado por el que ahora es presidente de la URSS. Y ante la amenaza de una posible guerra provocada por los chinos, al nuevo Papa le va a tocar mediar entre los presidentes soviético y estadounidense. Esta es, al menos, la trama política del libro.
Si embargo, para mí es mucho más interesante la trama personal del protagonista, que tras ser nombrado Papa tendrá que acomodarse al nuevo cargo y a su posición, de muchísimo poder pero tremendamente limitado por la estructura eclesiástica y por el recelo de algunos de los cardenales. En este extremo, su relación de amistad con un jesuita (inspirado en Pierre Teilhard de Chardin) se verá enfrentada al proceso del Santo Oficio del estudio de su obra. En particular, y ahí es donde se centra la novela, en la soledad (aún rodeado de gente) en la que tendrá que vivir desde el momento de su elección.
El libro lo compré en la estación de trenes de Bilbao, hace ya un par de años en un viaje de trabajo en el que pasé allí una semana, porque pensé que el libro que llevaba para leer (y que no recuerdo) no iba a ser suficiente. Pero el trabajo se complicó y acabó en la estantería sin abrir. Así que este verano cayó en la mochila y me lo leí en unos días. Me ha gustado mucho, y me he quedado con ganas de leer algo más de West